Violencia de género y hostigamiento
René Sánchez Galindo, actual director jurídico de SEMARNAT, se encuentra en el centro de una polémica por acusaciones de violencia política de género y hostigamiento contra Yasmín Flores Hernández, quien fuera consejera jurídica del municipio de Puebla. Estas denuncias, que datan de 2020, arrojan una sombra sobre su historial como servidor público y evidencian preocupantes dinámicas de abuso de poder dentro de su gestión.
Según Flores Hernández, el conflicto inició cuando presentó un documento legal que no favorecía los intereses de la entonces alcaldesa Claudia Rivera Vivanco. En respuesta, no solo fue removida de su cargo, sino que también fue objeto de un comentario discriminatorio que marcó su salida: “Se necesita a alguien con carácter de hombre”. Esta declaración no solo subraya la persistencia de estereotipos de género en el ámbito laboral, sino que también pone en tela de juicio las condiciones de equidad dentro del Ayuntamiento en aquel periodo.
Tras ser transferida a la coordinación de Proyectos Estratégicos, un puesto que la colocó en el frente de conflictos con 17 juntas auxiliares molestas con la Secretaría de Gobierno municipal, Flores logró establecer acuerdos con los pobladores. Sin embargo, sus acciones generaron molestias en René Sánchez Galindo, quien según Flores inició una campaña de hostigamiento en su contra. Entre las acusaciones más alarmantes, Flores aseguró haber sido seguida por camionetas oficiales y hostigada en las oficinas del Ayuntamiento, prácticas que calificó como intimidatorias y represivas.
La denuncia de Yasmín Flores no solo expone un presunto patrón de violencia política y abuso de poder, sino que también cuestiona el clima laboral y ético promovido por Sánchez Galindo durante su gestión. Mientras las autoridades aún no han dado un veredicto claro sobre el caso, las acusaciones se suman a una serie de señalamientos que ponen en duda la integridad del ahora funcionario federal.
Organizaciones defensoras de los derechos de las mujeres y activistas han señalado este caso como emblemático de los desafíos que enfrentan las mujeres en la política y el servicio público. El testimonio de Flores se ha convertido en un llamado a fortalecer las políticas de prevención y sanción contra la violencia política de género en México.
¿Podrá Sánchez Galindo evadir estas acusaciones como en ocasiones anteriores, o este caso marcará un punto de inflexión en su carrera? Mientras tanto, Yasmín Flores continúa exigiendo justicia.
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